martes, 16 de junio de 2015

No sé nada.

No sé si te quise.
No sé si te he querido. 
No sé si te quiero. 
Pero en el caso
 de que me faltase algo,
 - aunque no sé si me faltas -
ese algo serías tú.

Resulta incómodo
 - y agotador y todo lo que quieras -
describirte como algo.
Perdóname, eso suena muy 
deshumanizado y frío por mi parte.

Pero qué no es frio.
El mundo es frío.
Aunque nada hay tan frío
como mi corazón
- si es que existe eso -
desde que te marchaste.

Mi propósito era hablar de ti
y de la vida en general
y de ti y de mí
y de mis sentimientos en general.
Perdóname, entre tanto amor
- si es que en algún momento amé algo -
se me ha caído la vida a pedazos.

Y diría, supongo, 
que la vida es eso que pasa
mientras sollozas por la pérdida.
Porque no hay nada más oscuro
que la pérdida de alguien 
si aún tienes la oportunidad de recuperarlo
y no puedes.

No sé si te quise.
No sé si te quiero.
No sé si te he querido alguna vez.
Sólo sé que detrás de estos versos
sólo hay algo irreparable y vacío
como tú y yo como un colectivo.

Estoy pensando en qué somos,
entonces, los humanos.
- me incluyo por no sonar más frío
y deshumanizado -
Pero si tuviera que describirnos 
con una palabra
diría "incompletos".

No sé de qué estoy hablando.
No sé nada.

Pero nadie sabe nada.